Después de cuatro generaciones y 32 años de historia, el Opel Combo, con más ingredientes de turismo,llegará a los concesionarios en otoño, aunque las primeras reservas se podrán realizar desde antes de julio, según ha avanzado la marca del rayo en la presentación de la versión de pasajeros. A ésta le acompañarán una mixta y un furgón solo de carga.
Entre las cuestiones que lo acercan más al mundo de los automóviles, Gabriel de la Casa, jefe de Producto de Comerciales, destacó los sistemas de seguridad que equipa, entre los que resalta la alerta de colisión frontal, el sistema de detección de peatones, la frenada de emergencia, el asistente de cambio involuntario de carril y el control automático de velocidad de crucero. También presenta refinamientos de coches en aspecto como el hecho de recargar el móvil, siempre que sea compatible, de manera inductiva, o una pantalla de ocho pulgadas.
En total, el nuevo Combo incorpora 19 elementos tecnológicos, entre los que se encuentran aspectos de confort como la calefacción autónoma que se puede programar o, incluso activarse, sin necesidad de que el vehículo esté arrancado porque emplea un sistema de alimentación autónomo que no emplea la batería.
En cuanto a las motorizaciones, Opel lanza el Combo Life con cuatro motores diésel y dos de gasolina. Con este combustible habrá uno de 110 CV, que estará disponible desde el principio, y uno de 130 que llegará a mediados de 2019. Los de gasóleo van desde el de 75 CV –con el que se buscará un precio agresivo, sobre todo para las flotas– a 130, esta última podrá conjugarse con una caja de cambios automática de ocho velocidades nueva. La mayor apuesta por el diésel se debe a que en los comerciales sigue siendo la opción prioritaria.
Por otro lado, aunque no han informado de cifras de consumos, De la Casa ha afirmado que el peso se había reducido en 150 kilos, por lo que se situaba en torno a los 1.500 –con capacidad para arrastrar otra tonelada y media–, gracias a que la plataforma de PSA es más ligera que la que empleaban anteriormente.
El eléctrico, por su parte, llegará seguro aunque aún no hay fecha. El responsable de producto de Opel en España, Gabriel D’Amico, en declaraciones a La Tribuna de Automoción, destacó que PSA está haciendo un estudio para encontrar cuál es la autonomía más óptima para este tipo de vehículos, porque una opción de abaratar su coste es con un rango más ajustado a las necesidades de estos vehículos.
En cuanto a las dimensiones, se venderán dos versiones una de 4,4 metros de largo y otra de 4,75, aunque en ambos casos se podrá elegir entre la opción de cinco o siete pasajeros. El maletero será de 597 litros en la corta, con cinco pasajeros, y de 850 litros en la versión más larga.
Además, permite instalar tres sillas infantiles en los asientos traseros, y cargar 2.126 litros con los asientos abatidos. También se puede plegar el del copiloto, con lo que se consigue un espacio de carga de 3,05 metros. El hecho de que las puertas sean correderas facilita la carga y descarga.
Ventajas de que se fabrique en Vigo
El director general comercial de Opel España y Portugal, Jonathan Akeyrod, durante la presentación, señaló que para 2018 tienen buenas expectativas para el mercado de comerciales con un crecimiento que superaría el 10%, al pasar de las 200.000 unidades a 220.000 en 2018. Además, el segmento B, en el que compite el Combo, representa el 60% de las ventas.
Además, Akeyrod, en declaraciones a esta publicación, ha señalado que el hecho de que se produzca en la planta de PSA Vigo supone una ventaja comercial para el mercado español porque se acorta entre dos y tres semanas el traslado del vehículo.
Dentro de la ofensiva en el sector de los comerciales, también cabe destacar que el fabricante germano lanzará el Vivaro a finales de 2019 o principios de 2020 y que se seguirá ensamblando en Lutton (Reino Unido).
Pablo M. Ballesteros / Madrid
