Alberto Gutiérrez Molinero/ Madrid
Ayer acabó el plazo para que las empresas interesadas en comprar Saab presentaran “ofertas indicativas”, es decir, explicar qué parte de la empresa quieren comprar.
Así se expresó en rueda de prensa Hans Berggvist, uno de los administradores judiciales de la marca sueca, quien por lo demás no quiso desvelar muchos más detalles para no comprometer sus planes comerciales.
Bergqvist resaltó que la actividad en las últimas horas ha sido “febril” y confirmó que la inversora turca Brightwell Holdings se ha retirado de la puja por un desacuerdo con General Motors, antigua dueña de Saab Automobile y propietaria aún de las licencias técnicas, como habían adelantado horas antes medios suecos.
El administrador de Saab sí que confirmó que la china Youngman sigue interesada en la compra de la empresa y que han presentado una oferta, aunque no habló de cifras.
En una comparecencia anterior, los administradores ya aseguraron que su intención es vender de forma conjunta Saab Automobile y sus filiales para que se pueda reanudar la producción industria en la fábrica de Trollhättan, en Suecia.
En aquella comparecencia, los administadores dejaron claro que querían llevar a cabo la operación en el menor tiempo posible, aunque hoy Bergqvist no ha querido poner plazos concretos.
