La planta de Stellantis Madrid va a sumar una nueva silueta a la actual del Citroën C4, entre finales de este año y principios del próximo, que le llevará a producir unas 600 unidades al día, frente a las alrededor de 450 que ensambla a día de hoy, según ha podido saber La Tribuna de Automoción de fuentes del sector.
El primer paso se dará en septiembre cuando, en principio, se harán las primeras pruebas de un modelo que internamente se conoce como C-43 —el actual responde a la nomenclatura de C-41—. Será entonces cuando se fabricará el prototipo en un taller al margen de la línea, en el que se harán pruebas con las piezas.
En una situación en la que no hubiera escasez de semiconductores, ensamblar 600 unidades al día llevaría a la factoría de Villaverde a un volumen anual que sobrepasaría los 120.000 coches al año, lo que podría justificar incluso un tercer turno, aunque tal vez no de ocho horas, porque para subir el volumen en 20.000 automóviles habría que habilitar 33 jornadas extra, algo difícil de cumplir.
Este cálculo viene de que el director de la fábrica, Eric Brochard, señaló que ya con 100.000 unidades es cuando se hacía necesario el segundo equipo. Este hecho se consiguió en febrero de 2021 y supuso la llegada de 308 trabajadores al centro madrileño.
En principio, se había barajado que la versión novedosa del C4 fuera más tipo SUV, pero ahora, aunque sigue en el plano confidencial, parece que la opción station wagon le habría ganado la partida.
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