DS sigue su hoja de ruta y va sumando objetivos cumplidos. La premium gala del grupo Stellantis ya acepta pedidos de su cuarto modelo de desarrollo propio, el DS 4, cuyas primeras unidades llegarán a nuestro país a final de año por un precio que parte de los 29.900 euros. Con esta última incorporación «hemos cumplido el compromiso de lanzar cuatro modelos en tres años», explica orgulloso el director general de la firma en España, Borja Sekulits. Desde sus inicios como marca independiente de Citroën, DS acumula en nuestro mercado 13.941 matriculaciones, que remiten principalmente al DS 7 Crossback y al DS 3 Crossback, toda vez que la berlina DS 9 se ha retrasado en tiempos hasta coincidir su lanzamiento comercial con el prelanzamiento de este DS 4.
«Este año ha empezado duro, más duro de lo que esperábamos», analiza Sekulits. Sin embargo, a pesar de que en el acumulado hasta mayo el mercado total haya caído un 35,8% en relación a 2019 y el premium un 33,1%, DS mejora estos números con un descenso del 13,3%, situándose en el top 8 en su categoría con 1.427 unidades vendidas y una cuota del 2,22%, pisándole los talones a Land Rover en el séptimo puesto. Asimismo, como marca líder en electrificación del grupo francés, DS saca pecho tras haber acaparado el 5% de las ventas de bajas emisiones en el mercado de alta gama; es decir, de las 8.832 matriculaciones, 433 fueron del emblema galo.
El DS 4 entra a competir en una de las categorías más reñidas, el segmento C con altos niveles de calidad, en la que reinan el Audi A3, el BMW Serie 1 y el Mercedes Clase A. Sin olvidarse de que también puede ser competencia para los SUV derivados como el BMW X2 o el Lexus UX. En cualquier caso, todos ellos van a tener que hacerle un hueco a este compacto de 4,40 metros de largo, una notable anchura de 1,83 y 1,47 de alto, que calza además unas grandes ruedas con llanta de hasta 20 pulgadas.
Como sello de marca, tiene un frontal reconocible. En función de la versión, cuenta con una estructura en dos partes con formas de punta de diamante, en tamaños progresivos, que emergen de una parrilla tridimensional. Una calandra que conecta con unos faros muy estilizados que acogen una nueva firma luminosa, con luces diurnas compuestas por dos filas de LED a cada lado, y el sistema DS Matrix Led Vision con faros matriciales y direccionales. En la zaga, el techo se extiende para descender muy bajo sobre una luneta trasera especialmente inclinada.
Para entender la estructura de la gama hay que diferenciar entre tres versiones: DS 4; DS 4 Cross, de vocación más aventurera; y DS 4 Performance Line, de estilo más dinámico. Y, a su vez, cada una de ellas cuenta con cuatro niveles de acabado: Bastille, Bastille +, Trocadero y Rivoli, a los que se añade la edición limitada de lanzamiento La Premièr.
En lo que a conectividad se refiere, destaca el Head-up Display para que el conductor pueda estar al tanto de información esencial como es la velocidad o ayudas a la conducción, y el DS Iris System, que se controla por voz o gestos e integra un asistente personal capaz de reconocer lo que se dice para que el sistema ejecute las peticiones.
El confort viene acentuado por el DS Active Scan Suspension que, a través de una cámara colocada en la parte superior del parabrisas, visualiza y se anticipa a las irregularidades de la carretera, trasmitiendo los datos para que la suspensión sea más dura o blanda en función de las necesidades.
La oferta motriz se compone de tres propulsores gasolina de 130, 180 y 225 CV y una versión diésel de 130 CV, todas ellas con caja de cambios automática. Por último, y como no podía ser de otra manera, también se propone una opción híbrida enchufable denominada DS 4 E-TENSE, con una potencia de 225 CV gracias a su motor gasolina de 180 CV y otro eléctrico de 110 CV. Su batería de 12,4 kWh propicia una autonomía sin emisiones de 55 km.
