El avance en la reducción de emisiones de Volvo es indudable, y su nuevo XC40 Recharge es prueba fehaciente de ello. Con un motor de 300 kW (408 CV) y 660 Nm de par, sumado a la batería de 78 kWh que permite alcanzar una autonomía de 400 km, esta versión totalmente eléctrica completa la familia de este modelo que ya tenía otras opciones de propulsión: dos híbridas enchufables —211 CV y 262 CV—, una microhíbrida —197 CV— y otras dos de gasolina —129 y 163 CV—.
Es bien sabido que prácticamente todos los fabricantes de automóviles llevan meses reforzando su ofensiva de modelos de energías alternativas en sus gamas, tratando de bajar las medias de emisiones. No obstante, actores como Volvo tratan de romper el paradigma yendo un paso más allá, para ofertar no solo opciones electrificadas en sus familias de coches, sino que estas sean mayoritarias.
Un objetivo que cristaliza en el nuevo Volvo XC40 Recharge 100% eléctrico, que completa las motorizaciones de este vehículo del segmento C, el cual cuenta también con versiones híbridas enchufables —llevan igualmente el apellido Recharge—, microhíbrida y de gasolina.
Muy solvente
Se trata de un cero emisiones que monta un propulsor de 300 kW (408 CV) y 660 Nm de par, alimentado por una batería de 78 kWh, la cual permite una autonomía combinada de 400 km. Este acumulador, además, puede recargarse hasta el 80% en 40 minutos con un enchufe rápido de 150 kW, mientras que en un punto convencional de 11 kW se alargaría hasta las ocho horas.
En cuanto a sus hermanos de gama, las especificaciones PHEV incorporan motores de 211 y 262 CV, la microhíbrida (48V), uno de 197, y las de gasolina, dos de 129 y 163 CV.
Sus dimensiones tampoco dejan de lado la imponencia de este SUV, pues las líneas trazadas por los diseñadores suecos llevan al XC40 a los 4.425 mm de largo, los 2.034 mm de ancho y los 1.651 mm de alto, certificando una distancia al suelo de 176 mm. Sin embargo, al ser un Volvo, no puede dejar atrás la faceta de seguridad, por lo que la marca se ha implicado al máximo también en este aspecto.
La colocación de los paquetes de baterías en el suelo del modelo baja el centro de gravedad, aumentando la protección contra los posibles vuelcos, y su estructura ha sido reforzada tanto en la parte delantera como la trasera para conseguir, según se afirma desde la compañía, «una mejor distribución de las fuerzas de colisión fuera del habitáculo, así como reducir los daños a los ocupantes».
Volvo XC40 Recharge, con la seguridad por bandera
Además, los ADAS o sistemas avanzados de ayuda al conductor han sido desarrollados por Zenuity, la joint venture que la firma sueca tiene con la estadounidense Veoneer, y se han incorporado dentro de una nueva plataforma, que conecta el coche con un conjunto de radares, cámaras y sensores de ultrasonido. Esto se complementa con la inserción del Android Automotive OS para el control digital del vehículo, el cual permite que se detecte tanto la atención del piloto —manos en el volante y vista en la carretera—.
Asimismo, posibilita la actuación a la vez de las diferentes aplicaciones de Google, como Assistant —para interactuar desde el habitáculo con los dispositivos de la casa— y Maps —que, junto con las condiciones del tráfico y la planificación de rutas, puede indicar los puntos de carga más cercanos—.
Previsión de éxito de ventas
En vista de la demanda que puede crearse, Volvo ha triplicado su capacidad de producción de automóviles enchufables —actualmente ofrece una versión Recharge en todos los modelos de la gama—. De hecho, respecto a su comercialización, se ha hecho especial esfuerzo en que esta se realice de forma online, con la meta de poder vender todos sus cero emisiones a través de la web, facilitando al cliente la compra con preconfiguraciones.
Finalmente, los rangos de precios del Volvo XC40 varían en función de la propulsión que monten. El cabeza de cartel, el Recharge eléctrico, parte de los 54.623 euros —incluyendo seguro a todo riesgo tres años con franquicia flexible—. Los híbridos enchufables, por su parte, lo hacen desde los 46.500 euros el de 211 CV y los 47.600 el de 262 CV; mientras que la versión microhíbrida comienza en los 46.657 euros; y las de gasolina, en los 32.299,99 euros el 129 CV y los 34.700 el de 163 CV.
