La dirección de Nissan Barcelona y los sindicatos han acordado aplicar un ERTE, para mantener la fábrica cerrada por el coronavirus, complementando al equivalente al 85% del salario bruto la prestación por desempleo, según ha informado la propia compañía a esta publicación.
De esta forma, el fabricante nipón reconduce rápidamente las negociaciones, después de que ayer el Comité de Empresa diera “por rotas las negociaciones”, cuando la marca planteó que solo complementaría el salario hasta el 80%.
Además, durante el periodo que se extienda el expediente –en principio hasta que se recupere la normalidad en la cadena de suministro– los trabajadores mantendrán las pagas extras al 100%, así como la generación de días de vacaciones, en línea con Renault o con Seat.
Este ERTE afecta a las planta barcelonesa de Zona Franca, donde se montan los vehículos Nissan e-NV200, NP300 Navara, Mercedes Clase X (hasta mayo) y Renault Alaskan, así como a las Montcada y San Andreu de la Barca, que asisten a la primera. En total, dan empleo a alrededor de 3.000 trabajadores.
Además, el acuerdo recoge que, cuando sea posible retomar la actividad, habrá que seguir un protocolo de seguridad para evitar el contagio del virus, que se deberá consensuar con el comité.
