Laura Menéndez /Rocío Calderón /Madrid
CCOO lanza un mensaje de tranquilidad pero no de pasividad ante la adquisición de Opel por el Grupo PSA. Durante una rueda de prensa que ha tenido lugar en la sede de CCOO en Madrid, los representantes del sindicato explicaron que la compra ha abierto un periodo de incertidumbre, pero también supone una oportunidad para impulsar las tres plantas involucradas, la de Opel en Figueruelas (Aragón) y las dos de PSA en Vigo y Villaverde (Madrid), así como para que el sector de componentes también se beneficie de este proceso.
CCOO se ha marcado como metas que PSA y Opel respeten los compromisos adquiridos y garanticen el crecimiento del empleo, así como el mantenimiento de la producción de las tres factorías. Una producción que, según el secretario general de CCOO de Industria, Agustín Martín Martín, puede alcanzar un volumen de un millón de unidades al año. En 2016 la cifra se situó en los 847.000 vehículos ensamblados.
«La situación por el momento es de incertidumbre pero de tranquilidad dado que las tres plantas de ambos fabricantes en España son un ejemplo de competitividad y posicionamiento», explicó Martín.
Posición activa
Los sindicatos se preparan para la fusión con reuniones a todos los niveles. CCOO va a solicitar encuentros con el presidente del Comité Ejecutivo del Grupo PSA, Carlos Tavares, para conocer en detalle todo el proyecto, así como con las patronales españolas de fabricación de vehículos y de componentes, Anfac y Sernauto.
Asimismo, con el fin de iniciar un proceso de exigencia de posicionamiento se pedirán una reunión con el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, y con los presidentes de las comunidades autónomas en las que se encuentra cada una de las tres fábricas.
CCOO ha explicado que va a iniciar contactos con los sindicatos franceses y alemanes de ambos fabricantes para coordinar las futuras actuaciones y trabajar de forma conjunta.
PSA y GM ya colaboran juntos en Figueruelas
Por otra parte, la secretaria general de CC.OO. de Industria de Aragón, Ana Sánchez comunicó que se han mantenido en un “silencio expectante“, durante la negociación entre el grupo galo y norteamericano, junto a las demás plantas y la dirección europea, hasta que se anunciara la compra del consorcio francés. Ahora, señaló Sánchez, comienzan las conversaciones entre todas las partes, que puede durar un periodo, aproximado, “de entre seis y ocho meses“.
Concretamente, CCOO espera estar presente en la dirección sindical en el Comité de Empresa Europeo del grupo. “Vamos a tener un espacio donde vamos a poder defender los convenios o las inversiones que tenemos previstas,” puntualizó Sánchez.
El sindicato recordó que en dos de las tres fábricas de PSA y Opel en España, Vigo y Figueruelas, ya trabajan juntos. En concreto, en una de las líneas de producción, el 17 de abril se iniciará la fabricación del nuevo Crossland, que se realiza bajo una plataforma del grupo galo, igual que el nuevo C3 Picasso, que también se ensamblará en la planta aragonesa desde agosto. En la otra línea, se produce el Corsa. Sánchez señaló que “Ahora que se ha materializado la compra del consorcio galo de la marca Opel, será PSA quien dirigirá la ingeniería de las futuras versiones de este modelo”. No obstante, la miembro sindical añadió que “son aspectos que aún se deben concretar, la dirección gala tendrá que confirmar estas negociaciones, que iniciaron ayer, 6 de marzo”.
“Una oportunidad para Villaverde”
En relación a Villaverde, Agustín Martín comunicó que la adquisición podría permitir un aumento en la producción de la factoría de Madrid. “Esto tiene que ser un incentivo para solventar los problemas de falta de capacidad de la fábrica”. Es una planta pequeña pero bastante flexible, indicó Martín. En ese sentido, el representante puntualizó que esta operación puede suponer “una oportunidad para Villaverde”, puesto que “las factorías de PSA suelen ser más grandes”.
