Ignacio Anasagasti / Valladolid
El director de Fabricación y Logística del Grupo Renault y presidente de Renault España, José Vicente de los Mozos, ha confirmado esta mañana que la dirección general del fabricante ha adjudicado el tercer Plan Industrial a las factorías españolas, con una vigencia entre 2017 y 2020, que permitirá, además de la llegada de nuevos productos, “consolidar los cimientos” industriales del país, puesto que se mejoran las condiciones de competitividad sustancialmente para optar a “futuras adjudicaciones”. “Abrimos una nueva etapa”, ha sentenciado el directivo.
Este nuevo plan, de acuerdo con De los Mozos, “es el más potente” que Renault ha aprobado en España. En los dos anteriores, el fabricante francés hizo un desembolso de 500 y 600 millones de euros, por lo que el tercero debería suponer una inversión todavía mayor. El máximo directivo de la filial española, no obstante, no concretó la cifra exacta, porque “en estos momentos, se está consolidando” el programa de trabajo, sin embargo sí matizó que todo el dinero que se anuncie irá a parar a España, no como hacen otros fabricantes, con sus anuncios de inversiones, que incluyen partidas millonarias de procesos que se hacen en el extranjero.
La confirmación del plan, que ha sido posible tras la firma el 5 de abril de un acuerdo de competitividad y empleo –refrendado por UGT, CC.OO. y SCP-, supone la adjudicación, en las instalaciones de Valladolid, de un nuevo vehículo –no se han dado detalles, sólo que “no tiene porqué suponer que se deje de fabricar el Captur- y de las generaciones séptima y octava del motor K9, así como la implantación de una actividad de inyección de aluminio, a finales de 2017, que podría dar trabajo, inicialmente, a cerca de 90 empleados de fabricación e ingeniería, que podrán aumentar en el futuro. Esta nueva planta, que trabajará para la fábrica de motores, podría emplazarse dentro de la zona industrial de la marca en Valladolid o incluso en el futuro parque de proveedores que se está desarrollando junto a ella.
Aparte de esta carga de trabajo, en la factoría de transmisiones de Sevilla, se producirá la caja TX30, que requerirá de “una fuerte adaptación de las líneas”; y se reforzará la actividad de I+D en España, en la que intervienen, actualmente, 1.000 ingenieros. A lo largo de la vigencia del plan, se contratarán cerca de 150 efectivos más.
Al margen de los nuevos productos, otro aspecto relevante es que Renault, “en un mundo volátil”, se compromete a mantener hasta 2020 los volúmenes de producción medios de 2015, que fueron elevados en cada uno de los centros industriales.
El director de Fabricación y Logística agradeció el papel fundamental que han jugado los trabajadores y los sindicatos en la consecución del plan industrial, en el que también ha sido clave la propia competitividad de las plantas, “una magnífica red de proveedores” en España y el apoyo de las Administraciones Públicas.
Cuarto turno en Palencia
En la conferencia de prensa, De los Mozos declaró que ya hay un primer fruto del plan industrial y es la activación del turno de fines de semana y festivos en Palencia en septiembre, que supondrá la contratación de 1.000 nuevos trabajadores. Este nuevo turno, con el que se alcanzará una cadencia semanal de 8.000 unidades, necesitará que se modifiquen las líneas de producción del Kadjar y del Mégane en la parada de verano.
Esta tarde, el presidente de Renault en España se reunirá con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en La Moncloa, para informarle de los detalles del tercer plan industrial.
